Fuente (Alonso Navarro - Plantaromed)
Para germinar nuestras semillas de variedades antiguas podemos construir un germinador de semillas fácilmente. Para ello utilizaremos una estantería o un carri y crearemos espacios utilizando cajas de plástico y borriquetas o tablas, corcho o chapa marina.
Para construir las distintas alturas del germinador es recomendable utilizar materiales que conserven bien el calor y con unas separaciones entre ellos de 40-50 cm de alto. Una de las partes corresponderá al lugar de la calefacción. Rodeando al germinador hay que colocar un plástico transparente y una malla de sombreo para disminuir la luz un 40-50%.
En cuanto a su ubicación, es importante que sea un lugar que esté orientado al sol el máximo tiempo posible, para que recoja así toda su fuerza.
Una parte importante del germinador es la zona donde se genera calor, creando para ello como dos espacios uno dentro del otro. Con este fin podemos utilizar estiércol con paja u otros materiales que nos proporcionen calor, por ejemplo, un circuito de agua caliente, un muro de piedra orientado al sol, un bidón de color negro con agua que recoja el calor durante el día y lo suelte de noche con piedras en el fondo, etc.
Una recomendación importante es fumigar las cámaras de germinación con infusión de tomillo (mezclar 200 g de planta seca y 500 g de planta fresca en 4 litros de agua templada) diluida al 50%. También es conveniente fumigar con cola de caballo (mezclar 200-300 g de planta seca y 1 kg de planta fresca en 20 litros de agua, llevar a ebullición y dejar una hora a fuego lento), diluir después al 10%.
El material con el que hacer los semilleros puede ser corcho blanco, cajas de madera o alveolos, siempre que sea un material que conserve bien el calor.
Es aconsejable etiquetar los semilleros y llevar un cuaderno de notas con las fechas y los detalles que vayamos observando.
En cuanto a la tierra que vayamos a utilizar, lo más apropiado es que en la medida posible la elaboremos nosotros mismos, por ejemplo, con humus de lombriz (50%), compost casero (50%) o estiércol bien descompuesto de un año como mínimo (10%). Si además añadimos preparados biodinámicos a la tierra y orientamos las tareas que hagamos con un calendario biodinámico, el resultado será mucho mejor.
Es fundamental que el germinador de semillas esté cubierto por completo por un plástico para que mantenga bien el calor en el interior. Si el ambiente es muy seco se puede colocar un recipiente dentro del germinador para crear una atmósfera más húmeda. Es conveniente no abrir el plástico más de lo necesario. Regando bien la primera vez y manteniendo una humedad adecuada los riegos serán menos frecuentes. Por eso hay que ir observando cuándo es necesario.
En cuanto al tiempo de germinación, dependiendo de la semilla y de la época, en un intervalo de tres a quince días las semillas habrán germinado.
Es importante recoger el impulso del sol.